La periodista y precandidata presidencial colombiana, Vicky Dávila, conocida por su estilo directo y sus opiniones controvertidas, ha encendido el debate público tras un pronunciamiento en su cuenta de X (antes Twitter). En su mensaje, la exdirectora de la Revista Semana comparó la situación en Venezuela con los operativos llevados a cabo por Israel contra Hezbolá, sugiriendo que Colombia y las potencias occidentales deberían liderar una acción internacional para derrocar al régimen de Nicolás Maduro.

Dávila destacó que Israel logró desarticular a Hezbolá en semanas, combinando inteligencia y ataques quirúrgicos, lo que, según ella, dejó al régimen iraní debilitado y al pueblo exigiendo cambios. Basándose en este ejemplo, instó a una estrategia similar para enfrentar a Maduro, criticando al gobierno de Gustavo Petro por, según su opinión, «ser cómplice» del mandatario venezolano.

¿Un llamado a la acción militar?

Entre sus declaraciones, la periodista afirmó:

«Para mantener la paz, se necesita estar preparado para la guerra. El Gobierno Petro debería estar convocando y liderando estas conversaciones con la comunidad internacional.»
Sus palabras han sido interpretadas por algunos como un llamado a una intervención militar en la región, lo que ha generado una fuerte controversia en redes sociales y entre figuras políticas.

Críticas y preguntas incómodas

Varios sectores cuestionaron su postura, preguntándose si la precandidata estaría dispuesta a asumir las consecuencias de tal operación militar y si sus familiares participarían en un eventual conflicto. Los críticos también señalaron que una intervención armada podría agravar la crisis humanitaria en la frontera colombo-venezolana.

Por otro lado, sus seguidores consideran que su postura refleja firmeza y liderazgo frente a lo que describen como un régimen opresor en Venezuela.

¿Qué implica su propuesta?

El llamado de Vicky Dávila a la «guerra en la frontera» ha abierto un debate sobre la responsabilidad de los gobiernos regionales frente a la situación venezolana, el papel de Colombia en este contexto y las posibles consecuencias de una intervención internacional. Mientras tanto, las tensiones en la frontera continúan, y los desafíos diplomáticos para abordar la crisis parecen estar lejos de resolverse.

¿Será esta la postura que definirá su candidatura presidencial? La controversia está servida.