En una tensa sesión ordinaria de la junta directiva del Metro de Medellín, celebrada este miércoles en La Alpujarra, se determinó que el actual gerente, Tomás Elejalde Escobar, continuará liderando la entidad durante el resto del año. A pesar de semanas de controversias y manifestaciones ciudadanas exigiendo cambios en la dirección, la junta optó por mantener la estabilidad en la alta dirección.
La decisión de retener a Elejalde no estuvo exenta de tensiones, ya que diversos sectores de la ciudadanía habían expresado su descontento con la gestión del gerente del Metro. Sin embargo, la junta directiva se abstuvo de realizar modificaciones en las funciones y requisitos de su cargo, eligiendo postergar cualquier decisión al respecto para futuras reuniones en el año 2024.
Aunque Elejalde se mantiene en su posición, la junta solicitó documentos durante la sesión, anticipando una revisión de la continuidad de otros altos funcionarios que integran la gerencia del Metro. Este tema, según fuentes cercanas, será objeto de discusión en las sesiones planificadas para el próximo año.
Detalles de la reunión
La reunión abordó, además, otros asuntos cruciales para la empresa de transporte. Entre ellos, la deuda acumulada por la Alcaldía de Medellín con el Fondo de Estabilización fue tema de discusión, generando preocupaciones sobre el impacto financiero en la operación del Metro. Asimismo, se destacaron los retrasos persistentes en el proyecto del metro ligero por la Avenida 80, donde se enfrenta a desafíos en la gestión predial y en su fase de preconstrucción.
Hacia las 5:00 de la tarde de este 13 de diciembre, se espera que el gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, ofrezca una rueda de prensa para proporcionar un balance detallado de la sesión. Gaviria, en las últimas semanas, ha denunciado movimientos que podrían indicar intentos de transferir la entidad a allegados al exalcalde Daniel Quintero, agregando un elemento adicional de intriga a la situación.
Por otro lado, la incertidumbre sobre el futuro de la dirección del Metro persiste, dejando a la ciudad a la espera de futuras decisiones que podrían redefinir el rumbo de la entidad en el próximo año.