El gobernador de Antioquia, Aníbal Gaviria Correa, en compañía de los secretarios de Educación, Mónica Quiroz Viana, y de Gobierno, Rafael Blanco Lozano, acompañó este domingo en el municipio de Segovia las honras fúnebres del niño Maximiliano Tabares, las cuales se cumplieron en la capilla del cementerio de esa localidad del Nordeste.
El mandatario seccional, al expresar su solidaridad a la señora María del Carmen Tabares, abuela paterna del niño, y a la comunidad en general, destacó la importancia de la solidaridad que este caso ha despertado. “Una tragedia de estas, tan dolorosa, tan impactante, es más posible sobrellevarla como familia y como comunidad en la medida en que haya solidaridad, es decir, que nos acompañemos unos a otros. Por eso quiero agradecer ese gesto tan bonito de todos los presentes”, resaltó.
Añadió que “la solidaridad es la expresión del amor colectivo y los invito a seguir manifestándola. Que no sea de corto plazo, que no sea ave de corto vuelo, sino que permanezca en esta comunidad, que sigan acompañando a doña María del Carmen y a su familia”. Dijo también que este hecho ha estremecido a las gentes de Remedios, de Segovia y de toda Antioquia.
Expresó que la comunidad no debe dejarse llevar por la indiferencia, pues “es la que permite que se produzca la impunidad y la repetición de los abusos, la repetición de los delitos, no se puede ser indiferente. Como comunidad tenemos una responsabilidad, no solamente de los gobernantes o de la fuerza pública, sino de todos. Somos todos corresponsables de los otros. De nuestra familia humana”.
Finalmente, agradeció a las autoridades su actuación en este caso, que calificó como una respuesta rápida y contundente. “Producido el hecho doloroso de la desaparición del niño, se avanzó en la investigación y de ahí la Fiscalía, el CTI, la Policía y el Ejército, la Alcaldía, la Gobernación y la comunidad, produjo la captura de los presuntos responsables y luego el hallazgo doloroso del cuerpo de Maximialiano. Es un crimen que no quedará impune, y que mostró la fortaleza de las instituciones. Y se debe seguir actuando así”, concluyó.
Por su parte, el alcalde de Segovia, Didier Alexander Osorio Giraldo, pidió a Dios que “provea inmensa sabiduría a la familia que a partir de hoy comenzará a vivir un luto y un dolor imborrable” y manifestó que “hoy tenemos un ángel en el cielo, Maximiliano, un ángel al que le rogamos y le pedimos que proteja a su familia paterna y a la niñez. Que esta muerte no quede en vano, no queremos ver más maximilianos sacrificados por la ignorancia y la indolencia de algunos violentos”, finalizó.