Ramiro de Jesús Henao, alias «Simón», y quien está llamado a declarar por parte de la defensa del expresidente Álvaro Uribe en el juicio en su contra, seria miembro de una estructura criminal del Clan del Golfo.

La denuncia la hizo a través de su cuenta de X, el senador y víctima reconocida del proceso, Iván Cepeda.

“Hemos puesto en conocimiento de la señora juez que lleva este proceso, que Henao aparece en varios informes, que hemos venido corroborando, como el cabecilla de una nueva estructura del Clan del Golfo, la cual se está conformando con ex paramilitares en el nordeste antioqueño”, dijo Cepeda.

El senador agregó que en 2018, la Corte Suprema de Justicia compulsó copias contra alias ‘Simón’ por el presunto delito de falso testimonio.

La denuncia se conoce un dia después de que culminará una nueva sesión de juicio en contra del expresidente. En ella, Carlos López, alias «Caliche», aseguró que nunca conoció al exmandatario.

«Caliche» es señalado de haber presionado al testigo clave del caso, Juan Guillermo Monsalve, de retractarse de vincular al exmandatario con la creación de grupos paramilitares.

Y aunque desde el pasado martes, aceptó que engañó a Monsalve para que se retractara de esas declaraciones, dijo que nunca conoció a Uribe y que lo que hizo fue por voluntad propia y no por petición o intermediación de este o de Álvaro Hernán Prada, hoy magistrado del CNE. Hecho que no cree la Fiscalía.

Lo que dijo «Caliche» es que él nunca tuvo ningún tipo de contacto con el expresidente. “Esa fue una de las mentiras de Monsalve”, argumentó, pero sostuvo que sí tuvo conversaciones con Prada, pero que este no le pidió hacer ofrecimientos.

En el juicio ya declararon el senador Iván Cepeda, el condenado Juan Guillermo Monsalve y su exesposa, Deyanira Gómez. Además del abogado Héctor Romero, señalado de ser el responsable de meter el reloj espía a la cárcel para entregarlo a Monsalve y que sirvió para grabar las supuestas presiones a favor de Uribe, entre otros.

El proceso contra el exmandatario comenzó en 2018, cuando la Corte Suprema de Justicia abrió una investigación en su contra por la presunta manipulación de testigos en el proceso que él mismo había iniciado contra el senador Cepeda.

Durante las investigaciones, varios testigos se retractaron de sus declaraciones y uno de ellos, Juan Guillermo Monsalve, denunció que había recibido presiones para cambiar su versión.

La Corte Suprema archivó el caso contra Cepeda y abrió uno contra Uribe por los delitos de soborno a testigos y fraude procesal.

El juicio también se retoma luego de que la Fiscalía le negara una recusación que había presentado su defensa en contra de la fiscal del caso, Marlenne Orjuela, por supuestamente tener cercanía con el exfiscal general Eduardo Montealegre, una de las víctimas acreditadas en el proceso.

Aunque el documento oficial no se conoce aún. El recurso fue presentado por el abogado Jaime Lombana y tiene que ver con una designación del año 2012. Para entonces, Orjuela fue nombrada como fiscal delegada ante el Tribunal del Distrito por Montealegre, para entonces fiscal general.

Esta no es la primera movida legal que presenta la defensa del expresidente para tratar de sepultar el proceso. La más reciente, fue la decisión del Tribunal Superior de Bogotá que negó la tutela interpuesta por la defensa del expresidente, que alegaba vulneraciones al debido proceso por parte de la juez Sandra Liliana Heredia.

Tras analizar los argumentos, el Tribunal determinó que la acción presentada no procedía y ordenó la reanudación del juicio. Eso generó que el abogado defensor presentara una impugnación que este mismo jueves fue aceptada.

Fotos y noticia: Colprensa