Bogotá, 17 de julio de 2024 – A partir del pasado 15 de julio, las empresas en Colombia comenzarán a aplicar la reducción de la jornada laboral semanal a 46 horas, en cumplimiento con la Ley 2101 de 2021.

Esta medida busca promover un mejor equilibrio entre la vida personal y laboral de los trabajadores sin afectar su salario. Para que empleados y empleadores puedan entender cómo los impacta esta medida, Buk, software de gestión de personas explica los puntos más relevantes de este cambio.

La reducción gradual de la jornada laboral es un paso significativo hacia la mejora del bienestar de los empleados en Colombia y una oportunidad para que los empleadores y empleados encuentren un balance que favorezca tanto la productividad como la calidad de vida.

Siendo así, a partir del pasado 15 de julio la jornada será de 46 horas; en julio del año 2025, pasará a 44 horas y finalmente, a partir de julio de 2026, será de 42 horas semanales máximas. Este cambio coloca a Colombia en línea con las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) y los estándares internacionales.

Comentan desde Buk: «Esta reducción gradual de la jornada laboral representa un desafío y una oportunidad para las empresas en Colombia. Es crucial que las organizaciones adapten sus procesos y políticas para cumplir con la nueva normativa, al mismo tiempo que buscan mantener o mejorar la productividad. Creemos que una mejor gestión del tiempo de trabajo puede llevar a un ambiente laboral más saludable, más eficiente y beneficiosa tanta para colaboradores como empresas”.

La reducción de la jornada laboral se espera que aumente la productividad empresarial y el bienestar de los trabajadores. Al permitir más tiempo para la vida personal, los empleados pueden disfrutar de un mejor equilibrio, lo que puede traducirse en una mayor motivación y eficiencia en el trabajo.

¿Qué deben tener en cuenta las personas?

La reducción de la jornada laboral será implementada de manera flexible. Las horas laborales podrán distribuirse en 5 o 6 días a la semana, respetando siempre el día de descanso. Cada empresa podrá negociar con sus empleados para determinar la mejor manera de ajustar los horarios.

La ley no afecta a los servidores públicos, salvo aquellos que trabajen en empresas del Estado y cuya relación laboral se rija por el Código Sustantivo del Trabajo. Además, no modifica las jornadas laborales inferiores de trabajadores con horarios especiales, como menores de edad con contrato laboral y permiso del Ministerio de Trabajo.

Las empresas que no cumplan con la reducción de la jornada laboral pueden enfrentar serias consecuencias legales. El incumplimiento puede ser considerado una causa de despido indirecto, permitiendo a los empleados finalizar su contrato y exigir indemnizaciones.

Con la disminución de la jornada laboral, el valor de la hora trabajada aumenta, ya que los empleados seguirán recibiendo la misma remuneración por menos horas trabajadas. Las empresas deben ajustar sus sistemas de nómina para reflejar estos cambios y garantizar que los cálculos de horas extras, recargos nocturnos y pagos dominicales se realicen correctamente.