Germán Córdoba, uno de los hombres más cercanos al exvicepresidente German Vargas Lerras, radicó ante la Registraduría lo que podría ser una candidatura ‘a dos bandas’ del partido Cambio Radical a la presidencia de la República, para el periodo 2022 – 2026.
Las especulaciones sobre si finalmente Vargas Lleras asumirá o no el reto de llevar las banderas de su partido en la contienda siguen a la orden del día. Más aún cuando con un gran hermetismo Córdoba inscribió su candidatura, la cual sería una estrategia en favor de su copartidario.
Cambio Radical, al igual que otros movimientos y partidos, tenía plazo hasta este viernes para meterse en la contienda política, por lo que procedió a última hora a asegurar su lugar en el tarjetón, sea con Córdoba -lo cual parece poco probable- o con Vargas Lleras.
«Hemos venido a ejercer un derecho que nos da la ley y la Constitución como partido. En Cambio Radical siempre dijimos que nuestra decisión respecto al candidato presidencial la tomaríamos después del 13 de marzo», expresó el director de esta colectividad.
¿Pero por qué aún Vargas Lleras puede ser aspirante? Es importante destacar que partidos políticos tienen la opción de hacer cambios en las candidaturas presidenciales inscritas durante la próxima semana, del lunes 14 al viernes 18 de marzo.
Por lo que Cambio Radical, y en especial el exvicepresidente, esperarán por lo que ocurra este domingo en las urnas con sus listas a Senado y Cámara de Representantes. En lo que podría ser su tercer intento de llegar a la Casa de Nariño.
Es válido resaltar que la propaganda electoral que comenzó a desplegar el partido, en la que el propio Vargas Lleras invita a los ciudadanos a votar por Cambio Radical, dejó con intriga a la opinión pública. Por lo que había quienes ya se alistaban para recibir en la Registraduría al político.
«Vamos a escuchar este domingo a los colombianos a ver qué deciden. Vamos a escucharlos y solo con base en ello tomaremos una decisión sobre quién debe ser el candidato presidencial de Cambio Radical», agregó Córdoba, quien le estaría ‘guardando el puesto’ al jefe natural de su partido.