En una ceremonia solemne y significativa, la Princesa Leonor de Borbón juró la Constitución Española en el Congreso de los Diputados. La joven Princesa, quien cumplió 18 años este 31 de octubre, cumplió con el requisito necesario para asumir la posición de reina y jefa del Estado de España en caso de muerte, enfermedad o abdicación del actual rey, Felipe VI.

El acto se llevó a cabo en presencia de los máximos representantes de los tres poderes del Estado Español. La Princesa Leonor juró «guardar y hacer guardar la Constitución» y manifestó su fidelidad a su padre, el Rey Felipe VI.

La ceremonia se celebró en el Congreso de los Diputados, el corazón de la democracia española. La Plaza de Sol, en Madrid, se llenó de espectadores y ciudadanos que se congregaron para presenciar este importante momento en España.

¿Qué significa la jura a la Constitución?

La jura de la Constitución por parte de la Princesa Leonor es un evento que ha sido esperado y anticipado por muchos en España. Se convierte en una declaración de su compromiso con los principios democráticos y los valores constitucionales que sustentan la nación. En su discurso, la Princesa expresó su dedicación a servir a todos los españoles con respeto y lealtad.

Por su parte el presidente, Pedro Sánchez, ofreció un discurso en el Palacio Real después de la jura de la Princesa, en el que reafirmó el compromiso del Gobierno con la Princesa Leonor y la monarquía. «Contad, alteza, con la lealtad, el respeto y el afecto del Gobierno», afirmó El presidente.

Además de la jura de la Constitución, la Princesa Leonor recibió la Orden de Carlos III, una de las más altas distinciones del Reino. Este honor conmemora su mayoría de edad y su compromiso con la nación. La Princesa también fue condecorada con medallas del Congreso y el Senado, que reconocen su papel en la vida política y su futura responsabilidad como jefa del Estado.

Al finalizar la tarde la familia real española se reunió en el Palacio del Pardo para cerrar las celebraciones del día en honor al cumpleaños de la princesa.

 

Por: Sara Pardo Del Río