Popayán, Cauca, sábado 8 de junio de 2024. El Gobierno Nacional en cabeza del Presidente de Colombia, Gustavo Petro Urrego, rechazó enérgicamente los recientes ataques perpetrados contra la fuerza pública y la población civil en los municipios de Popayán, Cauca y Jamundí, Valle del Cauca.

«Son inaceptables estos actos de violencia que pretenden socavar la tranquilidad del pueblo colombiano. Quienes optan por la violencia y perpetúan el conflicto armado enfrentarán todo el peso de la ley», cita el comunicado oficial de la Presidencia de la República de Colombia.

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Señalan su apoyo a las fuerzas militares en su lucha contra el crimen organizado y su compromiso con defender a la comunidad.

«Reiteramos nuestro total respaldo a las Fuerzas Militares, quienes están llevando a cabo una ofensiva efectiva contra las estructuras ilegales que amenazan la paz y la seguridad de nuestra nación. No cesaremos en nuestro empeño por desmantelar estas organizaciones criminales que, de manera errada, eligieron la guerra por encima de la paz».

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Finalmente, aseguraron que buscarán seguir velando por la seguridad de las comunidades de la mano de las fuerzas armadas, contra las estructuras que no les interesa la paz en Colombia:

«Nuestro compromiso con la protección del pueblo Colombiano y el bienestar de nuestros soldados y policías es inquebrantable. De nosotros no esperen otra cosa que un Gobierno que trabaja incansablemente para garantizar la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos afectados por estos actos de violencia».

Esto se da luego de que un uniformado resultara herido en Popayán tras un atentado explosivo en inmediaciones del Comando de Policía, mientras que en Jamundí, un carro bomba generó miedo y zozobra al explotar también cerca de una estación de policía. En ninguno de los casos se presentaron víctimas mortales.