La empresa UNE EPM Telecomunicaciones, que opera bajo la marca Tigo, solicitó ante el Ministerio de Trabajo autorización para un despido masivo como parte de un plan de reestructuración organizativa y sostenibilidad económica. Según Tigo, la decisión responde a un análisis estructural enfocado en superar los desafíos financieros del sector de telecomunicaciones en Colombia.

El Ministerio del Trabajo, liderado por Gloria Inés Ramírez, informó que inició un proceso administrativo para verificar el cumplimiento de los requisitos legales de la solicitud. Esto incluirá la práctica de pruebas y análisis que permitan tomar una decisión fundamentada dentro del marco del debido proceso.

«Lo dijimos, lo advertimos y tratamos de evitarlo hasta el último día: el proyecto de privatización de UNE-EPM que presentó Fico Gutiérrez al Concejo de Medellín NO TENÍA UNA SOLA COMA SOBRE PROTECCIÓN DE LOS DERECHOS DE LOS TRABAJADORES, y el comité de aplausos aprobó sin chistar», aseguró el concejal José Luis Marín.

Reestructuración y retiro voluntario

Como parte del plan, la compañía ha implementado una «Política de Retiro Anticipado» dirigida a empleados prepensionados o con edad para jubilarse. Esta iniciativa estará disponible en dos periodos: del 7 de enero al 30 de abril y hasta el 31 de octubre del presente año. La medida busca optimizar la estructura organizacional y garantizar la sostenibilidad de la operación a largo plazo.

Reacciones y críticas

El sindicato SINTRAEMSDES rechazó la solicitud de despido colectivo, calificándola de desproporcionada y perjudicial para los trabajadores. A su vez, empleados han manifestado su preocupación, señalando que se enteraron de la situación después de que la empresa notificara a los medios de comunicación.

Por su parte, Tigo sostiene que esta decisión es necesaria para enfrentar un entorno competitivo y las dificultades financieras que afectan al sector. Además, subrayó que los despidos se realizarán en cumplimiento de la normativa laboral vigente, que exige la autorización del Ministerio del Trabajo.

Impacto en el sector

Con más de 3,900 empleados y una base de usuarios significativa en América Latina, Tigo es el tercer operador móvil en Colombia, después de Claro y Movistar. El anuncio llega en un momento crítico para la industria, caracterizado por una intensa competencia y la consolidación de actores principales.

El proceso será supervisado de cerca por las autoridades laborales, quienes deberán garantizar el respeto a los derechos de los trabajadores y promover el diálogo social para minimizar el impacto de esta medida.