El encuentro celebrado este 12 de noviembre, el estadio Atanasio Girardot fue testigo de un enfrentamiento electrizante entre Millonarios y Atlético Nacional. Con una asistencia impresionante de 23,053 aficionados, el cuadrangular se convirtió en un escenario vibrante para ambos equipos, pero fue Millonarios quien salió victorioso al finalizar el partido con un marcador de 1-0.
Desde el inicio, Millonarios demostró su determinación al conseguir una victoria inobjetable en el estadio rival. La presión constante y un juego táctico sólido les permitieron dominar la primera etapa, dejando a Nacional en búsqueda de respuestas. Con un gol que resonó en el estadio, Millonarios consolidó su ventaja y llevó a cabo una actuación que dejó a los espectadores expectantes.
En un intento por cambiar el rumbo del partido, el director técnico de Nacional, Jhon Bodmer, tomó decisiones audaces durante el segundo tiempo. Sacando a Jhon Duque, un volante de marca que había tenido un impacto notable, Bodmer hizo entrar a Dorlan Pabón, buscando revitalizar el ataque. Además, refrescó la banda izquierda con la entrada de Brahian Palacios por Yair Mena, identificando una posible vulnerabilidad en la defensa de Millonarios.
Aunque Nacional logró algunos momentos prometedores al comienzo de la segunda mitad, con un rendimiento más dinámico, no lograron capitalizar en oportunidades claras de gol. La atajada destacada de Montero a un remate de Pabón fue uno de los pocos momentos de amenaza real por parte de Nacional. Sin embargo, Millonarios, con determinación y eficacia, retomó el control del juego, emulando su dominio en la primera etapa.
El partido culminó con Millonarios asegurando su victoria por 1-0, dejando una estocada final que resonará en la memoria de los aficionados. Este triunfo no solo representa un logro en el cuadrangular, sino que también otorga a Millonarios un impulso psicológico valioso a tan solo tres días de enfrentarse a Nacional en El Campín, en el juego de ida de la final de la Copa Colombia.