En una operación articulada entre el Gaula de la Policía Metropolitana, la Fiscalía Seccional y las salas de monitoreo del Sistema Integrado de Emergencias y Seguridad de Medellín, la cual se ejecutó en la ciudad tras varios meses de investigación, se identificó a los 14 miembros de una banda delincuencial dedicada al secuestro exprés y al hurto a ciudadanos extranjeros, que según se determinó, eran seleccionados e identificados a través de redes sociales o en sitios de esparcimiento.

“Gracias a los fiscales que estuvieron liderando la investigación; gracias a las denuncias que hicieron los ciudadanos que en su momento se vieron afectados. Por ellos es que podemos dar estos resultados tan importantes para la ciudad, para el país, el de capturas de organizaciones dedicadas a generar ambientes de inseguridad en algunos sectores de la ciudad, como es el secuestro, el hurto calificado, agravado, el homicidio, como se ha presentado con algunas personas y de otra nacionalidad”, dijo el secretario de Seguridad y Convivencia, BG. José Gerardo Acevedo Ossa.

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En 17 allanamientos realizados en diferentes zonas del área metropolitana, se materializaron 14 órdenes de captura, cuatro de ellas correspondientes a menores de edad instrumentalizadas como señuelos para atraer a turistas de varias nacionalidades, para después cometerles los hurtos, o bien, someterlos a vejámenes que, incluso, en un caso ocurrido en febrero pasado, le ocasionaron la muerte al ciudadano sueco Kile Alexander Macquenzie, cuyo cuerpo fue hallado en el cerro Las Tres Cruces.

“Estas personas utilizaban una modalidad, a través de la instrumentalización de menores, empleando plataformas, aplicaciones de citas y las redes sociales para, por intermedio de menores de edad y mujeres atractivas, cautivar a extranjeros y posteriormente realizarles secuestro extorsivo en la modalidad de paseo millonario”, señaló el comandante de la Policía Metropolitana, BG. Rosemberg Novoa.

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La banda establecía contacto con las víctimas, las invitaban a salir y las inducían a tomar transporte informal. Se estableció que el conductor del vehículo también era miembro de la organización. Cuando la víctima se encontraba dentro del vehículo, era intimidada con arma de fuego y a unas cuadras de distancia llegaba otro automóvil, golpeaban y amenazaban a las víctimas para obtener las claves de sus cuentas virtuales, como bitcoins, tarjetas de crédito y débito. Posteriormente, realizaban retiros en cajeros electrónicos y compras de joyas y electrodomésticos.

“En cumplimiento del direccionamiento estratégico del señor fiscal, en un trabajo articulado con la Policía, se logra la medida de aseguramiento en contra de 10 adultos y también se logran cuatro medidas de internamiento preventivo en contra de las cuatro menores de edad quienes hacían parte de esta organización”, explicó la directora de la Fiscalía Seccional de Medellín, Yiri Milena Amado Sánchez.

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Según advirtió la Policía Metropolitana, se encontraron 10 denuncias, se realizaron entrevistas y se tomaron declaraciones a testigos clave. Además, se hicieron reconocimientos fotográficos, recolección de información por medios técnicos, análisis de cámaras de seguridad e inspecciones; incluso, fue necesario el apoyo de un biólogo forense para el análisis de evidencias durante cinco meses.

La operación, con más de 50 hombres del Gaula, se adelantó de manera simultánea en el corregimiento Santa Elena y en los barrios Boyacá Las Brisas, Playitas, Laureles, Manrique Oriental, Campo Valdés y el municipio de Bello. Fueron capturados dos cabecillas: alias ‘Pulsar’ y alias ‘Mateo’.

Además, fueron incautadas cuatro armas de fuego, seis vehículos, tres motocicletas, 23 celulares de alta gama, seis datáfonos inalámbricos, tarjetas bancarias extranjeras, tres equipos portátiles, joyas y más de $20 millones en efectivo. Se estima que obtuvieron más de $2.000 millones producto de su actividad delictiva durante dos años.