La salud mundial ha escalado en la agenda política en los últimos años, en parte debido a la pandemia por COVID-19. En línea con esto, el lavado y secado de manos con toalla de papel desechable se convirtió en una práctica fundamental para mantener la higiene personal. Medidas como ésta deben integrarse en una agenda de prevención pública que promueva la higiene de manos y la preparación para pandemias y otras amenazas a la salud.

El Día Mundial del Lavado de Manos se celebra anualmente el 15 de octubre y tiene como objetivo principal sensibilizar a nivel global sobre la importancia del lavado de manos con jabón, así como el correcto secado con toalla desechable, como una medida sencilla pero efectiva para prevenir enfermedades y salvar vidas. Esta iniciativa fue impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la UNICEF, y se lanzó por primera vez en 2008 como parte de la campaña «Salva vidas: lávate las manos”.

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“Para la prevención eficaz de las enfermedades, son cruciales las medidas esenciales de higiene y salud. Es importante que estas medidas no sean olvidadas y sigan integrándose en una agenda de educación en prevención por parte de las empresas, instituciones educativas y hogares para evitar las pandemias y otras amenazas a la salud. Impulsar acciones preventivas como la higiene de las manos salva vidas, mantiene a las personas sanas, evita ausentismos laborales, reduce los costos sanitarios a largo plazo y mejora la productividad. Si no se cuenta con acceso a servicios básicos de higiene, las personas corren un mayor riesgo de infección”, afirma Felipe Gómez Director Comercial Familia Institucional – Tork Essity Latin América.

La prevención es crucial para reducir la propagación de infecciones en la sociedad y en los entornos sanitarios. La higiene de las manos es la medida más eficaz de prevención de infecciones, que se logra lavando las manos con agua y jabón o utilizando desinfectantes de manos a base de alcohol, según corresponda.

Además de esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) asegura que el lavado de manos con agua y jabón puede reducir la incidencia de enfermedades diarreicas infantiles en un 50% y las infecciones respiratorias en un 25%.

Es importante recordar que el tiempo adecuado para lavarse las manos de manera efectiva es al menos 40 segundos. Este período de tiempo asegura que se puedan limpiar correctamente y eliminar la suciedad y los gérmenes de manera efectiva.

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El Día Mundial del Lavado de Manos es una oportunidad para recordar a las personas de todo el mundo la importancia de esta práctica simple pero esencial para la salud pública y la prevención de enfermedades, y para promover su adopción en todo tipo de comunidades y entorno.

 El Reporte de Higiene y Salud que presentó la compañía actualmente tiene como objetivo contribuir al diálogo mundial sobre salud a través de conocimientos e ideas, anclados en las agendas globales actuales y futuras. Destacando temas en los que las acciones colectivas pueden mejorar las condiciones de higiene y salud a nivel mundial.