En el marco de la instalación del 14° Congreso de Acceso a Servicios Financieros y Medios de Pago – CAMP 2024, el presidente de Asobancaria, Jonathan Malagón, respaldó el diagnóstico que ha hecho, reiteradamente, el superintendente Financiero de Colombia, César Ferrari, argumentando que los indicadores de ahorro e inversión en Colombia son bajos y, como consecuencia, el crecimiento del país también lo es.
El líder gremial reveló que en la actualidad el PIB per cápita en paridad de poder adquisitivo de Colombia es de 15.855 dólares, mientras que en países como España es de 40.407 dólares. Indicó que, con el crecimiento promedio de los últimos 15 años (3%), el país tardaría unos 40 años en alcanzar el indicador del país ibérico. Sin embargo, mencionó que, si la economía local creciera un punto porcentual adicional, es decir, a una tasa del 4%, solo tardaría la mitad del tiempo.
Pero para que Colombia crezca al 4%, la inversión debería representar el 29% del PIB, no obstante, en la actualidad solo alcanza el 15,2%, la mitad de lo necesario. Agregó que, para lograr ese crecimiento, la cartera crediticia debería aumentar de $726 billones a $1.021 billones, lo que implica que el índice de profundización financiera debería pasar del 46% actual, al 65%.
Para ello, Malagón resaltó que el país debe centrar su mirada en el crédito de naturaleza productiva, ya que está asociado a la inversión que Colombia necesita para impulsar su crecimiento.
Asimismo, recordó la meta del Gobierno de entregar 1 millón de créditos por alrededor de $4 billones a la economía popular para 2026. Destacó que tanto en monto como en número de desembolsos se ha avanzado lentamente: “Llevamos el 15% de la plata, $600.000 millones, y el 18,6% de las transacciones, unas 186.000. Ya sea en monto o en transacciones, vamos quedados”.
El presidente recalcó que la banca ha hecho la mayor parte del esfuerzo, aportando el 95% de los recursos irrigados en créditos productivos populares, $570.000 millones de los $600.000 millones y realizando 168.000 de las 186.000 transacciones. Además, manifestó que el Gobierno está rezagado en el cumplimiento de su propia meta, otorgando solo 13.000 garantías y 2.000 créditos de redescuento, que no alcanzan a ser ni siquiera el 10% del total. Por otro lado, indicó que las Fintech han contribuido aún menos que el Gobierno, colocando solo unas 2.000 transacciones, equivalentes a unos $2.000 millones.
Bajo ese contexto, el presidente del gremio fue enfático al señalar que “ha llegado el momento de pasar del discurso al desembolso. La manera de refrendar el compromiso con la economía popular es financiando a los colombianos que necesitan este tipo de crédito. Mi llamado hoy es para que el Gobierno, las Fintech y, por supuesto, los bancos, trabajemos juntos para ir más allá. Todos, sin excepción, debemos hacer un esfuerzo adicional en el otorgamiento de créditos para la economía popular”.