El presidente argentino, Javier Milei, enfrenta una crisis política tras promover la criptomoneda $LIBRA, que sufrió un colapso abrupto, generando pérdidas millonarias a miles de inversores.
El pasado viernes, Milei publicó en su cuenta de X (antes Twitter) un mensaje respaldando $LIBRA, describiéndola como un proyecto destinado a «incentivar el crecimiento de la economía argentina» mediante el financiamiento de pequeñas empresas y emprendimientos locales. Este respaldo provocó que el valor de la criptomoneda se disparara de casi cero a aproximadamente 5 dólares en cuestión de horas.
(Le puede interesar: Rescatan a ocho menores víctimas de explotación sexual)
Sin embargo, poco después, su valor se desplomó por debajo de 1 dólar, lo que generó sospechas de una posible estafa tipo «rug pull», donde los creadores inflan artificialmente el valor de un activo para luego retirar sus fondos, dejando a los inversores con activos devaluados. Ante la controversia, Milei eliminó su publicación y afirmó no estar al tanto de los detalles del proyecto. No obstante, la oposición política ha solicitado un juicio político en su contra, acusándolo de participar en un fraude relacionado con criptomonedas. Además, se han presentado denuncias legales que buscan investigar la posible comisión de delitos como estafa y asociación ilícita por parte del mandatario.
Este escándalo ha impactado negativamente en la economía argentina, con una caída del 5,6% en el índice Merval de la Bolsa de Buenos Aires. Milei ha defendido su posición, argumentando que su intención era apoyar proyectos tecnológicos y que los inversores eran conscientes de los riesgos asociados. Sin embargo, este incidente ha puesto en entredicho su credibilidad y ha generado un intenso debate sobre la responsabilidad de los líderes políticos en la promoción de inversiones financieras.