El Dr. Agustín García Peiró, experto en genética reproductiva e infertilidad masculina, destaca que hasta el 50 % de los casos de infertilidad tienen su origen en problemas masculinos. Sin embargo, los tratamientos de fertilidad suelen centrarse exclusivamente en la mujer, dejando de lado un análisis profundo del factor masculino.
El doctor, fundador del Centro de Infertilidad Masculina y Análisis de Barcelona (CIMAB), subraya la importancia de incorporar el análisis genético del esperma antes de iniciar tratamientos de fertilidad:
“Muchas parejas enfrentan repetidos ciclos de Fecundación In Vitro (FIV) que fracasan, algo que podría evitarse evaluando la genética del esperma desde el principio”.
La importancia del análisis genético del esperma
El seminograma, prueba común en la evaluación masculina, no detecta alteraciones genéticas críticas. Según el Dr. García Peiró, una causa frecuente de fallos en tratamientos de fertilidad, abortos espontáneos o fallos de implantación es la fragmentación del ADN espermático, que puede pasar desapercibida en pruebas básicas.
El especialista recomienda incluir pruebas específicas como el test CometFertility para detectar daños genéticos en los espermatozoides, ofreciendo una evaluación más completa y precisa.
Experiencia y resultados del CIMAB
Con más de 20.000 análisis realizados y habiendo atendido a unas 1.500 parejas, el Dr. García Peiró explica que muchas personas llegan a su consulta tras múltiples intentos fallidos de fertilización asistida:
“A menudo creen que la solución está en recurrir a espermatozoides u óvulos de donante, pero al analizar el factor masculino podemos identificar la causa real del problema y ofrecer soluciones personalizadas, devolviendo la esperanza a las parejas”.
Un cambio de paradigma en los tratamientos de fertilidad
El Dr. García Peiró hace un llamado a cambiar la perspectiva sobre la infertilidad:
“La fertilidad es una cuestión de pareja. Ambos deben ser tratados con la misma importancia. Incluir el análisis genético del factor masculino de manera sistemática es fundamental para el éxito de los tratamientos reproductivos”.
Este enfoque no solo optimiza los resultados, sino que también ayuda a las parejas a tomar decisiones informadas y a entender mejor sus posibilidades reales de concebir.