Una avalancha de tierra y material rocoso en la vereda Las Playas, en el corregimiento de San Antonio de Prado, encendió las alarmas en Medellín y el vecino municipio de Itagüí, toda vez que se apoderó de la quebrada Doña María, arrasando todo a su paso.
Esta grave emergencia ambiental dejó hasta el momento dos personas muertas, según reportes de los organismos de emergencia de la capital antioqueña. Una tragedia que, según los expertos, ya estaba advertida, por la fragilidad del terreno.
Las víctimas fueron una mujer de 30 años y la de un menor de 2 años, quienes quedaron sepultadas tras el copioso deslizamiento de la montaña, que obligó a la presencia de más de 15 unidades del Cuerpo de Bomberos de Medellín y municipios aledaños.
Lamento informar la perdida de la vida de una Mujer de 30 años y la de un menor de 2 años en el movimiento en masa presentado en el corregimiento de San Antonio de Prado. Seguimos avanzando en las tareas de búsqueda y rescate. https://t.co/FLtpGju60X
— Daniel Quintero Calle (@QuinteroCalle) July 13, 2022
De acuerdo con las primeras versiones, cuando avanzaba la tarde del miércoles, los vecinos de la vereda Las Playas alertaron los ruidos que generó el momento en el que la montaña empezó a ceder ante la fuerza de la naturaleza.
El alcalde de Medellín, Daniel Quintero Calle, quien hizo presencia en la zona del derrumbe, manifestó que sigue la alerta en todo este terreno, y en el afluente de la quebrada Doña María, con el fin de prevenir cualquier hecho que lamentar.
«Hay una masa de tierra que es posible que se descuelgue nuevamente. Está siendo monitoreada con el Área Metropolitana, tenemos tres puntos de control, vamos a tener un sistema de cámaras que va a estar monitoreando en tiempo real la ladera», expresó Quintero.
Los trabajos continúan con rigurosidad. Estamos trabajando con los equipos para proteger la vida. pic.twitter.com/bRU4X5vRlM
— Daniel Quintero Calle (@QuinteroCalle) July 14, 2022
Del mismo modo, anunció que las Empresas Públicas de Medellín (EPM) pondrán a disposición de la comunidad lámparas de 10.000 watts, que permitirán iluminar la emergencia de tipo geológico que ha ocurrido. Que lo atribuyó al cambio climático que afecta a la ciudad.
Lo preocupante es que desde hace al menos cinco meses esta tragedia fue denunciada. Sin embargo, al parecer las entidades encargadas no habrían tomado determinaciones que hubieran mitigado el impacto del derrumbe, que tiene en vilo a los habitantes del corregimiento San Antonio de Prado.
«Era una tragedia anunciada, porque en la zona donde se desprendió el alud había como un pedazo pequeño que había tapado una laguna, un charco que había ahí», dijo Natalia Arroyave, en declaraciones recogidas por Blu Radio.