La noticia ha causado resistencia en algunos sectores políticos como dentro de las fuerzas militares, al catalogarla como “inoportuna”, ya que da, según el coronel Augusto Paez, “Pie para que nunca se ejecute un plan de avance operativo o de intervención bélica ante ataques a nuestras fuerzas militares”.
De igual manera, reaccionó la oposición del Gobierno, en la que coincidieron en manifestar que cesar los bombardeos es una medida improvisada que no permitiría perseguir delincuentes. Por su parte, organizaciones Nacionales como ONG, han aplaudido el anuncio, ya que lo consideran en defensa a los derechos humanos y de los menores de edad, los cuales son víctimas del reclutamiento forzado.
Iván Velásquez, el ministro de Defensa, causó de esta manera un revuelo que varios políticos no reaccionaron. Al respecto, el senador de Cambio Radical Carlos Motoa cree que esta es medida improvisada.
“La responsabilidad constitucional de la Fuerza Aérea, de las Fuerzas Militares y de su comandante en jefe (presidente de la República) es perseguir a los delincuentes y a los terroristas, capturarlos o darles de baja. Si es una propuesta para proteger menores, debe fortalecerse la inteligencia militar y no este anuncio de limitar la capacidad de respuesta y de prevención”, aseveró Motoa.
Así mismo, la representante a la Cámara por la Alianza Verde Katherine Miranda, líder quien ha denunciado con énfasis los bombardeos que llevaron a la muerte de menores en varios hechos que fueron conocidos en el país, celebró el anuncio.
“Yo celebro la decisión del ministro de defensa, esto tiene que acabar. Más de 26 niños fueron asesinados a través de este mecanismo durante el gobierno de Iván Duque y tenemos que entender que los niños no hacen parte de las hostilidades, que hacen parte de un reclutamiento forzoso, que ellos son población civil y no máquinas de guerra”