La historia de Colombia ha demostrado que la violencia política es un cáncer que puede destruir nuestra sociedad. Desde la Masacre de las Bananeras en 1928, pasando por el Bogotazo en 1948 y la Guerra de los Mil Días entre 1899 y 1902, hemos visto cómo la intolerancia y la violencia han dejado profundas heridas en nuestro país.
Hoy, Esteban Restrepo, el único candidato del Pacto Histórico que logró abanderar cerca de 240 mil votos en Antioquia, enfrenta ataques de la derecha y algunos medios digitales tras su nombramiento como Secretario Privado en Ecopetrol. Esto no es nuevo; en el pasado, la Unión Patriótica fue asesinada, perseguida, aterrorizada y humillada en público.
Si en verdad no cumple con los requisitos para ejercer el cargo, el señor Esteban Restrepo debe salir inmediatamente. Además, si en efecto llegara a realizar algún acto irregular, serán los organismos de control y vigilancia los que deberán actuar con severidad. Sin embargo, hay que respetar el derecho al trabajo que tiene él como cualquier otro ciudadano.
Pero eso sí, Catalina Gutiérrez, la hermana de Federico Gutiérrez lleva años trabajando en una filial de ISA, ganándose un millonario sueldo y parece inamovible en su cargo. Nadie dice nada, nadie revira o saca a relucir las razones por las que llegó hasta allí. Además, la mayoría de los exsecretarios de Fico Gutiérrez en 2016 hoy ocupan diferentes cargos públicos.
Es hora de aprender del pasado, dejar el odio y la polarización para trabajar hacia un futuro más próspero y pacífico para todos los colombianos. La libertad de pensar diferente es fundamental para construir una sociedad más justa y democrática.
Hacemos un llamado al respeto por las diferencias. Debemos aprender a escuchar y valorar las opiniones divergentes, y aceptar sin violencia la diversidad política y social. La democracia se fortalece con la participación ciudadana y el respeto por los derechos humanos.
No podemos permitir que la polarización y el odio nos dividan. Debemos encontrar un terreno común para construir un futuro mejor para todos. Esteban Restrepo y otros líderes como él merecen garantías por sus posturas. Juntos podemos hacer la diferencia. Juntos podemos construir una Colombia más justa, pacífica y respetuosa.
Editorial Nación Paisa