Durante la última década, el sector minero energético ha sido un importante contribuyente al total de exportaciones colombianas. Este sector no solo es clave para las cuentas fiscales del país, sino que desempeña un papel fundamental en la estabilidad del balance externo.
Según un informe publicado por Asobancaria, las exportaciones asociadas al sector minero energético alcanzaron “alcanzaron el 56% del total, mientras que en el año anterior la cifra bordeó el 57,1%. En lo que respecta a los ingresos por exportaciones (en millones de dólares FOB) de estos bienes, se aprecia que ha primado el efecto precio sobre el efecto cantidad, hecho que se ha evidenciado con más claridad a partir del año 2020”.
En lo que respecta a la Inversión Extranjera Directa (IED) en el sector, de acuerdo con el gremio, en 2022 bordeó el 25,6%, cifra que si bien fue levemente inferior a la de la última década (28%), mostró un repunte frente al año previo a la pandemia al crecer en 6%. “De esta manera, el año anterior esta rama de actividad se ubicó como la segunda que más atrajo IED, solo superada por la de servicios financieros y empresariales”, señala el documento.
