Enero 13 es el Día Mundial de la Lucha contra la Depresión, una fecha que invita a reflexionar sobre la importancia de la salud mental. Según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la depresión afecta a más de 280 millones de personas en el mundo y es una de las principales causas de discapacidad.
Ángela Gissette Caro, docente de psicología del Politécnico Grancolombiano, compartió información clave sobre cómo identificar señales de alerta, prevenir esta enfermedad y apoyar a quienes la padecen.
¿Qué es la depresión y cuáles son sus síntomas?
La depresión trasciende la tristeza pasajera, afectando profundamente la vida diaria de quienes la experimentan. Entre los síntomas más comunes destacan:
- Tristeza persistente y sensación de vacío.
- Pérdida de interés en actividades que antes se disfrutaban.
- Fatiga crónica y falta de energía.
- Cambios en los patrones de sueño y apetito.
- Dificultades para concentrarse.
- Pensamientos recurrentes de inutilidad o muerte.
La experta explica que, a diferencia de la ansiedad o el estrés, la depresión implica una visión constante y negativa de uno mismo, del entorno y del futuro.
Señales de alerta temprana
La detección oportuna es fundamental para evitar que los síntomas se agraven. Las señales iniciales incluyen:
- Irritabilidad o alta sensibilidad emocional.
- Aislamiento social progresivo.
- Cambios en el sueño y la alimentación.
“Es importante no ignorar estas señales y buscar ayuda profesional. Hablar con alguien de confianza puede ser el primer paso para recibir atención”, afirma Caro.
Estrategias de prevención y apoyo
La prevención de la depresión es una responsabilidad individual y colectiva. En entornos laborales, educativos y familiares, es fundamental:
- Fomentar espacios libres de violencia.
- Promover el apoyo emocional.
- Fortalecer relaciones comunitarias.
A nivel personal, hábitos como el ejercicio regular, una alimentación equilibrada y el autocuidado son clave para prevenir este trastorno. Sin embargo, si los síntomas persisten, buscar ayuda profesional es indispensable.
En cuanto al apoyo a personas cercanas, la docente recomienda:
- Escuchar sin juzgar.
- Ofrecer empatía.
- Acompañar en el proceso de búsqueda de atención profesional.
El llamado a la acción
“El cuidado de la salud mental es igual de importante que el de la salud física. Hablar de nuestras emociones y buscar ayuda profesional debe normalizarse como un acto de valentía y autocuidado”, concluye Caro.
Si conoce a alguien que enfrenta esta situación, brindar apoyo y alentar a esa persona a buscar ayuda profesional puede marcar la diferencia en su proceso de recuperación.