La Alcaldía de Medellín, bajo la administración de Federico Gutiérrez, se encuentra en el centro de un aparente escándalo de corrupción tras revelarse contratos por más de 1.700 millones de pesos con la firma GOBS. La investigación ha sacado a la luz presuntos vínculos directos entre empleados de GOBS y altos funcionarios de la Alcaldía, generando serias dudas sobre la legalidad de los procesos de contratación.

Contratación de GOBS y sus implicaciones

GOBS, representada legalmente por Ricardo Valencia Escobar, habría recibido múltiples contratos con la Alcaldía de Medellín. Lo que resulta alarmante es que el mismo Valencia Escobar también figura como contratista de la administración municipal por un monto superior a los 150 millones de pesos, en un aparente caso de doble beneficio.

Según se ha revelado, varios coordinadores de proyectos de GOBS, como Lia Urzola y Lucas Montoya, tienen contratos directos con la Secretaría de Hacienda de la Alcaldía. Urzola ha sido contratada por más de 90 millones de pesos, mientras que Montoya suma contratos por más de 100 millones.

¿Vínculos familiares y conflicto de intereses?

El escándalo toma un giro aún más complejo al descubrirse que Daniel Felipe Escobar Valencia, exsubsecretario de Hacienda, es amigo cercano de Ricardo Valencia Escobar. Además, Escobar Valencia es hermano del diputado Mateo Escobar, quien también ha estado envuelto en otros escándalos relacionados con la administración de Gutiérrez.

Uso de información privilegiada

Se ha denunciado que empleados de GOBS, además de ser contratistas de la Alcaldía, al parecer estarían utilizando información privilegiada de la Secretaría de Hacienda para contactar a ciudadanos con deudas pendientes y ofrecer sus servicios con el fin de reducir dichas deudas. Se reporta que, en algunos casos, se habrían enviado correos desde direcciones institucionales de la Alcaldía con la firma de GOBS, lo que sugiere una grave falta de transparencia.

Respuesta de Daniel Escobar Valencia

Ante las acusaciones, Daniel Escobar Valencia, actual director de la APP (Agencia para la Gestión del Paisaje, el Patrimonio y las Alianzas Público-Privadas de Medellín), desmintió tener cualquier vínculo de consanguineidad con Ricardo Valencia Escobar. En declaraciones a IFMNOTICIAS, Escobar aseguró que las acusaciones son infundadas y anunció medidas legales contra quienes difundieron la información.

Escobar reiteró en  este medio que, durante sus años de servicio, nunca ha sido señalado por actos de corrupción y que siempre ha actuado con ética y transparencia.

Frente a la gravedad de los hechos, ciudadanos y organizaciones han solicitado a la Fiscalía General de la Nación y a la Procuraduría General de la Nación investigar a fondo estos contratos y determinar si hay lugar a sanciones penales o disciplinarias.

Este escándalo pone nuevamente en el ojo del huracán a la administración de Federico Gutiérrez, generando cuestionamientos sobre la transparencia en la contratación pública de Medellín. La Unidad Investigativa de Nación Paisa contactó a la Alcaldía de Medellín para aclarar el tema, pero hasta el momento no se ha pronunciado al respecto.