A 24 días del pitazo inicial, Colombia ya no será sede de la Copa América, cuando se esperaba romper con dos décadas sin recibir el certamen continental. La Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) confirmó este jueves que el evento de selecciones más antiguo del mundo ya no se jugará en el país, debido al fuerte estallido social que lo tiene consumido en un prolongado paro nacional.
Los hechos de orden público que han imposibilitado desarrollar los encuentros de los equipos colombianos en la Copa Libertadores y Copa Sudamericana, los cuales se han tenido que desarrollar en Ecuador, Bolivia, Paraguay y Venezuela, y la constante amenaza de boicot por parte de grupos de manifestantes, minaron el camino para que el organismo tomara finalmente la determinación.
Así dio a conocer la decisión a través de su página web, luego de la petición hecha por el ministro del Deporte, Ernesto Lucena Barrero, quien había solicitado al ente rector que se postergara la realización del certamen para finales del año, en pro de solucionar los problemas que se venían registrando en el país, no solo con las movilizaciones, sino también por el virus del COVID-19.
«Por razones relacionadas al calendario internacional de competiciones y a la logística del torneo, resulta imposible trasladar la Copa América 2021 al mes de noviembre», indicó la Conmebol, con lo que desechó de tajo la propuesta del Gobierno Nacional y sigue empeñada en llevar a cabo el certamen en el próximo mes de junio, debido a la urgencia de cumplir con los compromisos pactados.
«La Conmebol agradece el entusiasmo y el empeño puestos por el presidente de la República de Colombia, Sr. Iván Duque y sus colaboradores, así como por el presidente de la Federación Colombiana de Futbol, Ramón Jesurún, y su equipo. Es seguro que en el futuro surgirán nuevos proyectos en conjunto para el crecimiento del fútbol colombiano y sudamericano», agregó.
La entidad manifestó que la Copa América 2021 está garantizada «e informará en los próximos días la relocalización de los partidos que debían disputarse en Colombia», en las sedes de Bogotá, Cali, Medellín y Barranquilla. Esta última ciudad, con su estadio Metropolitano, estaba programa para recibir la gran final del torneo, el próximo 12 de julio, para lo cual remodeló el escenario.
En consecuencia, la decisión de Conmebol es que Argentina, que en su momento también estuvo en duda de recibirla por la actualidad de la pandemia, organice en solitario la Copa América, que arrancaría el 13 de junio, después de un año de aplazamiento y la negativa de selecciones como Australia y Catar de jugarla, por lo que solo se haría con elencos del hemisferio sur, a la vieja usanza.