Los bombardeos de Israel sobre Gaza han dejado un saldo devastador en la población del territorio palestino, con el 6 % de sus habitantes muertos o heridos en el último año, según informó hoy la Organización Mundial de la Salud (OMS). Este informe refleja el alto costo humano que ha dejado el conflicto armado en la región.
El jefe de emergencias de la OMS para los territorios palestinos ocupados, Ayadil Saparbekov, reveló que alrededor de 41.800 personas han perdido la vida, mientras que cerca de 97.000 han resultado heridas, muchas de ellas con secuelas permanentes. A estas cifras se suman 10.000 personas desaparecidas, que se teme estén atrapadas bajo los escombros de los edificios destruidos.
Si Gaza (Hamas) bombardea a Israel, no pasa nada
Si Líbano (Hezbolá) bombardea a Israel, no pasa nada
Si Yemen (huties) bombardea a Israel, no pasa nada
Si Irán bombardea a Israel, no pasa nada
Pero si Israel responde a los bombardeos es un ¡GENOCIDIO!
La manipulación mediática pic.twitter.com/YyD6iuTA3C— Capitán Gral de los Tercios/Virrey de las Américas (@capTercio) October 3, 2024
Colapso del sistema sanitario en Gaza
El sistema de salud de Gaza está al borde del colapso, señaló Saparbekov, debido a los repetidos ataques a las infraestructuras médicas. Los bombardeos han afectado a casi la mitad de los hospitales, con 43 % de ellos operando de manera parcial y una capacidad limitada a 1.500 camas. Además, diez hospitales de campaña ofrecen 650 camas adicionales. La falta de medicamentos, combustible y personal sanitario sigue siendo crítica, agravada por la muerte de más de 1.000 trabajadores de la salud.
Hasta la fecha, se han registrado al menos 516 ataques directos contra instalaciones médicas, que han dejado 765 fallecidos. A pesar de las crecientes necesidades, los recursos continúan siendo insuficientes para atender a la creciente cantidad de heridos.
Un testimonio de dolor y resistencia
Durante una conferencia de prensa virtual con la ONU en Ginebra, Saparbekov compartió su experiencia en el terreno, recordando su tiempo en el hospital Al-Shifa, el mayor centro médico de Gaza. Describió el asedio y los ataques que sufrieron las instalaciones durante semanas, dejando tras de sí un rastro de muerte y destrucción. “El hedor a sangre podrida y muerte en el patio de Al-Shifa es algo que jamás olvidaré”, confesó.Lea también: Israel lanza incursión terrestre en el sur del Líbano en medio de bombardeos
