Unos mensajes, relacionados con una denuncia sobre un supuesto caso de agresión sexual, aparecieron en los baños del Congreso de la República en las últimas horas.
«Rompimos el silencio y nada paso», «la sororidad les quedo en discurso» y «aquí a los acosadores les renuevan el contrato», son algunos de los mensajes pintados con labial que aparecieron en los baños en la sede del legislativo.
Los mensajes tienen relación con una denuncia por presunto agresión sexual contra un funcionario del Congreso, que, de acuerdo con la denunciante, no tuvo ninguna respuesta por parte del órgano legislativo.
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Tania Acero, ex funcionaria del Congreso, denunció que fue agredida por Juan Camilo Díaz, compañero de la misma institución. En su relato asegura que no recibió ningún tipo de ayuda o acompañamiento del legislativo, a pesar de acudir a la ruta de protocolo para estos casos.
«Yo me comuniqué con esta ruta la cual nos dijeron en el momento que la abrieron que era segura que nos iba a brindar apoyo. A día de hoy no he recibido ninguna clase de apoyo», señaló Acero.
Incluso, agregó que más mujeres se le han acercado para decirle que se han sentido acosadas o violentadas por la misma persona. Sin embargo, a pesar de las denuncias, el funcionario sigue trabajando en el Congreso y le renovaron el contrato.
«No hubo ningún tipo de repercusión. Me lo tengo que seguir encontrando poniendo a diario mi condición física y emocional en juego», sostiene Acero, quien señaló que presentó la denuncia ante la Fiscalía.
Ella asegura que tras romper una relación sentimental con él, el hombre la intentó agredir sexualmente en varias ocasiones, la encerraba a la fuerza en las oficinas del Congreso, la acosaba y la seguía hasta su casa.
