En tiempos donde el poder busca silenciar a quienes lo incomodan, ejercer el periodismo se convierte en un acto de resistencia. Desde Nación Colombia, Nación Paisa y Nación Costeña hemos sido testigos y víctimas de lo que significa hacer periodismo independiente en un país donde la verdad molesta y el control de la narrativa es un botín de guerra.

Hemos enfrentado ciberataques, intentos de desacreditación y campañas de desprestigio orquestadas por quienes prefieren la opacidad sobre la transparencia. Nos han señalado, nos han querido reducir a una simple etiqueta y han intentado borrar nuestro trabajo del ecosistema informativo. Pero si algo ha demostrado la historia del periodismo en Colombia, es que callar no es una opción.

Hoy son más de dos millones quinientas mil personas las que ven nuestros contenidos. A ustedes, mil gracias. Seguiremos disgustando a los poderosos que tuercen la ley y a los acomodados que buscan imponer narrativas para ocultar la verdad y proteger a esos poderosos.

El periodismo libre e independiente es un pilar fundamental de cualquier sociedad democrática. Sin él, los abusos de poder se multiplican en la sombra, la corrupción se expande sin freno y los ciudadanos quedan a merced de la desinformación. Hoy, quienes nos atacan intentan imponer la idea de que la verdad depende de quién la diga. Pero la realidad no cambia porque alguien quiera silenciarla.

Sabemos que cada investigación, cada denuncia y cada noticia que publicamos tiene impacto. Sabemos que incomodamos. Y también sabemos que eso es, precisamente, lo que significa hacer periodismo de verdad.

No nos vamos a rendir. No nos vamos a callar. Y si intentan tumbarnos, nos levantaremos más fuertes. Porque en Nación Paisa, creemos que informar no es solo un derecho, es un deber.

Agradecemos a la Fundación para la Libertad de Prensa – FLIP – por el respaldo que nos brindó en un momento difícil para nuestro Sistema Informativo. Reiteramos nuestro compromiso con el periodismo independiente en Colombia.

A quienes intentan silenciarnos: aquí seguimos. Y seguiremos.