En una de las operaciones logísticas más destacadas del año, el Metro de Medellín recibió 290 barras de rieles, equivalentes a 5,2 kilómetros, que serán destinados al mantenimiento de las líneas A y B en 2024. Los rieles llegaron desde Austria, donde fueron fabricados en acero especial endurecido, y fueron transportados desde Amberes, Bélgica, hasta el puerto de Barranquilla. Nueve tractomulas se encargaron de llevarlos finalmente a los talleres del sistema de transporte.

Cada barra tiene un peso aproximado de 972 kilogramos y, en el proceso de instalación, se alcanzan temperaturas de hasta 2.000 grados Celsius mediante soldadura aluminotérmica. Estas características garantizan mayor durabilidad y resistencia para los tramos que serán reemplazados.

El Metro de Medellín explicó que esta renovación es parte de su plan de mantenimiento anual, que incluye actividades predictivas, preventivas y correctivas. La sustitución de rieles es esencial debido al desgaste, la pérdida de perfil y los defectos que se generan con el paso constante de los trenes. Según las inspecciones realizadas, se espera completar el cambio de 3,2 kilómetros de rieles antes de que finalice 2024.

Además del reemplazo, la empresa adelanta trabajos de reperfilado para corregir defectos superficiales en los rieles, prolongando su vida útil y asegurando la seguridad del sistema. También se ejecutan labores de bateo, donde se nivela la vía férrea, se compacta la piedra triturada y se estabiliza la estructura para garantizar su óptimo desempeño.

Con una inversión anual de $200.000 millones, el Metro de Medellín reafirma su compromiso con la calidad del servicio. Esta reciente importación de rieles es una de las más grandes en los 29 años de operación comercial del sistema y busca mantener el estándar de seguridad y eficiencia para los 80 trenes que recorren las líneas diariamente.

Cabe recordar que hace un año la empresa completó la modernización de los 42 trenes originales, alargando su vida útil por 25 años más, un proyecto que tomó cinco años y marcó un hito en la historia del transporte masivo de la ciudad.
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