Tener mayor cobertura del PAE con una estrategia integral que contribuya a mitigar y superar la situación de hambre que vive la ciudad, es la solicitud de los concejales a la Administración Distrital, que evidenció grave déficit y aumento de la inseguridad alimentaria en Medellín.
Según las cifras oficiales, en Medellín hay más de 715 mil personas en condiciones de inseguridad alimentaria. De ellas, 427.967 personas están en riesgo moderado y 288.128 en riesgo severo. Según datos de “Medellín Cómo Vamos”, en la administración anterior casi 30 mil niños estuvieron en riesgo de desnutrición crónica.
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En la plenaria se exhibieron datos contundentes como la realidad de los corregimientos en los cuales aumentó la inseguridad alimentaria del 46 % al 66 %. En San Antonio de Prado se inscribieron 5.833 familias, pero 1.185 no cumplieron requisitos; aunque 4.648 los cumplieron, de ellas se seleccionaron 800 de acuerdo al recurso priorizado por el corregimiento y los 3.848 restantes quedaron en lista de espera en orden de mayor grado de vulnerabilidad e inseguridad alimentaria.
Acciones que pide el Concejo de Medellín para acabar con el hambre
La ruralidad debe ser la gran protagonista apostando desde allí a la conservación y creación de empresas locales, aumentando la superficie cultivada y sus capacidades de producción; y fortaleciendo las comunidades agrícolas de manera que el sistema alimentario sea más seguro y sostenible, enfatizaron en sus intervenciones.
Además, indicaron que, con trabajo articulado entre el Estado, la familia y las organizaciones privadas se mitigaría la inseguridad alimentaria del Distrito, redoblando esfuerzos para atacar la desnutrición crónica en articulación con Buen Comienzo y haciendo alianzas con las plazas de mercado de la ciudad.
A su vez, los concejales pidieron mejorar el valor nutricional de la alimentación, brindar alimentación a los jóvenes, apoyo financiero y logístico a los agricultores, que los operadores tengan valor técnico y se contraten aquellos que generen transparencia en los procesos y se realice una interventoría adecuada para el cumplimiento de la calidad de alimentación que se le entrega a los niños y niñas en las instituciones educativas. Un niño con hambre no aprende, enfatizaron.
Cifras reveladas por el DANE
Por su parte, la secretaria de Inclusión Social, Familia y DDHH, Sandra Milena Sánchez, expresó que en el Distrito existen 939.966 hogares y alrededor de 2.612.958 personas, según censo del DANE de 2022. Con respecto a los niveles de inseguridad alimentaria, indicó que, de esos hogares, el 33 % (310.189 hogares) se ubican en nivel leve, el 15.7 % (147.575 hogares) se encuentran en nivel moderado y el 10.7 % (99.355 hogares) en grado severo.
Con relación al Programa de Alimentación Escolar – PAE, la funcionaria afirmó que los recursos son insuficientes para garantizar la contratación de todo el año escolar; en este mismo sentido, 115 comedores escolares ubicados en instituciones educativas tienen modalidad de atención con ración de contingencia por dificultades en la infraestructura para la prestación del servicio.
El 22 de enero pasado, primer día del calendario escolar, se dio inicio al programa, expuso Sánchez. Asimismo, estableció que se avanza en la revisión del equilibrio contractual, el nuevo proceso de licitación pública para garantizar la contratación del programa del 21 de febrero al 9 de septiembre para no generar retrasos y el Concurso de Méritos para la interventoría del programa la cual no quedó publicada en diciembre.