El anuncio lo hace el presidente nacional de la Red de Veedurías de Colombia, Pablo Bustos, en medio de las negociaciones que adelanta el Comité Nacional del Paro, con el gobierno del presidente Iván Duque, toda vez que se hace necesario que el partido de gobierno y sus aliados se aparten y dejen de torpedear el manejo administrativo y corporativo de las Empresas Públicas de Medellín (EPM).
“Medellín tiene una de las empresas más estables y productivas de Colombia y merece tener independencia para que la discusión que hoy es política, se torne en técnica, financiera y económica de cara al cumplimiento de las metas energéticas que el país requiere para las próximas generaciones” dijo Pablo Bustos, presidente de la Red Nacional de Veedurías, quien además indicó que “con amañadas denuncias pretenden instrumentalizar la opinión y generar un desgaste judicial, hoy se busca poner en entredicho nuevamente a EPM”.
La Red de Veedurías de Colombia, le pidió al excandidato a la Cámara de representantes, Hernán Cadavid, no instrumentalizar la justicia con sus intereses personales o partidistas, o proselitistas de cara a las próximas elecciones, toda vez que el excandidato y activista político pretendería a través de una acción de nulidad, – como parte de su campaña al Congreso de la República- desestabilizar una vez mas el buen funcionamiento de EPM, una de las empresas mas importantes del país, y por lo mismo menoscabar este patrimonio público, no solo de los antioqueños, sino de todos los colombianos.
Por lo anterior, la Red de Veedurías de Colombia se permite informar a la opinión pública, y al país en general que se hará parte del proceso veedurial, administrativo, fiscal, y de ser necesario penal lo que se da en EPM para garantizar que el patrimonio de los colombianos sea bien administrado por fuera del marco nefasto de las rencillas proselitistas.
Finalmente cabe aclarar que los entes de supervisión, control, y vigilancia ya han venido tomando decisiones administrativas, jurídicas, y preventivas para evitar el aparente desfalco, posibles malas administraciones, y al parecer desvíos de recursos entorno a decisiones que se adoptaron en las administraciones anteriores de EPM.