La Institución Educativa José Acevedo y Gómez, asentada en el barrio Guayabal, fue una de las primeras en implementar el modelo de alternancia educativa en octubre del año pasado, propuesto por la Secretaría de Educación de Medellín para enfrentar los retos de la continuidad de la enseñanza a los estudiantes de la ciudad que impuso el coronavirus. Así, en alternancia, terminaron el año sin grandes contratiempos.
Hoy, varios meses después, ese mismo centro educativo vuelve y juega y es uno de los primeros de la ciudad en donde su equipo directivo y docente recibe la primera dosis de vacunación contra el COVID-19, en un proceso que adelanta la Administración Municipal, para que este sector retome la alternancia escolar y la vida académica vaya recobrando poco a poco la normalidad perdida.
Esta vacunación -que se seguirá brindando- se realiza en el coliseo de voleibol, Yesid Santos de la Unidad Deportiva Atanasio Girardot. “Empezar con nosotros para recibir la primera dosis, seguramente obedece a que fuimos de las primeras instituciones que trabajaron en la alternancia en 2020 y realmente nos parece muy importante el reconocimiento al trabajo del equipo y al buen protocolo de bioseguridad que tuvimos en el último trimestre del año pasado”, manifiesta Jerónimo Cano Calle, maestro de Ciencias Sociales, Política y Economía, en los grados 9,10 y 11 de este colegio.
Una decisión acertada
Este educador que habita en el barrio San Joaquín -al centro occidente de la ciudad- aunque considera razonables las exigencias de algunos sectores sindicales, ve acertada la decisión de la Secretaría de Educación de Medellín de gestionar las vacunas para el sector directivo y docente en donde ya se tienen instituciones con protocolos aprobados y en el caso de ellos -al ser de los primeros en recibir los biológicos- por el hecho de servir de referente a otras personas.
“A uno le genera cierto temor y algunas reservas, pero no para llenarse de pánico -resalta-. Me parece que la vacunación es una carta bien jugada y ojalá se puedan vacunar los demás docentes para que pueda gestionarse el pronto retorno a las aulas en otras instituciones de la ciudad”.
Nada reemplaza lo presencial
Al referirse a la forma como se está llevando a cabo el proceso escolar con la pandemia afirma que “desde lo virtual hay unas posibilidades muy interesantes con el material que se puede compartir; permite hacer algunas cosas que desde la presencialidad pueden ser más difíciles, pero esto nunca va a reemplazar la efectividad de lo presencial, porque esto brinda mayores niveles de motivación, entre otras cosas, porque hay una relación directa con el estudiante que va más allá de lo académico. Considero que, en esta etapa escolar, los estudiantes requieren más un asunto formativo enfocado en competencias sociales y comunicativas, que no se logran con la virtualidad”, expresa.
“A nivel de colegio, la educación presencial es más emotiva y cercana, resulta que los estudiantes lo quieren a uno más de lo que uno se imagina. Veo a los muchachos muy animados y muy contentos con el retorno a los salones de clase, al punto que manifiestan que quieren que toda la semana sea presencial y no virtual. Eso es muy bonito y valoro el ánimo de los alumnos porque uno en la virtualidad se alcanza a deprimir por la poca participación que se da en clase”, opina al hablar sobre el retorno físico a las aulas de clase.
Se debe apoyar la vacunación
Para Jerónimo, Magister en Educación con énfasis en Ambientes Virtuales de Aprendizaje de la Universidad Pontifica Bolivariana, el proceso de vacunación fue muy organizado y se debe hacer. “La logística en el coliseo de voleibol fue muy buena y muy rápida. La Alcaldía de Medellín se fajó con el tema. Mi mensaje, al margen de la protesta social, es que se debe apoyar la gestión que hace la Administración Municipal con este proceso de vacunación. Esto no garantiza la inmunidad total, pero las experiencias del año pasado, en términos estadísticos, nos dan muy buena espina para reiniciar los procesos de alternancia en las instituciones educativas de la ciudad”, concluye.
Inicialmente se vacuna a 1.000 integrantes de la comunidad educativa de 17 colegios oficiales, priorizados para realizar el plan piloto del Gobierno Nacional. Las 37 sedes educativas de las 17 instituciones cuyo personal está siendo vacunado se ubican en las comunas de Villa Hermosa, Doce de Octubre, Guayabal, Santa Cruz, Buenos Aires, Popular, Aranjuez, San Javier y en los corregimientos de San Antonio de Prado y San Cristóbal.
Esta vacunación se suma a la entrega que se hizo a la comunidad educativa de Medellín de kits de bioseguridad, con una inversión de 421 millones de pesos, con lo que se espera continuar el proceso formativo sin mayores contratiempos.
Son acciones preventivas realizadas por Medellín Me Cuida -en estas épocas de pandemia- para salvaguardar la salud y la integridad de los diferentes grupos poblacionales de nuestra ciudad.
