El multimillonario sudafricano, quien es el hombre más rico del mundo, Elon Musk, puede declararse el dueño absoluto de Twitter, luego de luchar por tener todo el control y no una gran parte de ella que no le permitía autonomía suficiente para tomar decisiones. Ya ahora que lo puede hacer, su primera medida ha sido despedir a cuatro de sus máximos dirigentes, entre ellos Parag Agrawal, el consejero delegado.
Así mismo tuvieron la misma suerte tres ejecutivos más, quienes fueron despedidos, siendo el jefe financiero de Twitter, Ned Segal; la máxima responsable legal y de políticas, Vijaya Gadde; y el abogado principal de la firma, Sean Edgett.
Según se pudo conocer, por fuentes anónimas y que hacen parte de la compañía, atestiguaron como al menos uno de los ejecutivos fue escoltado por miembros de seguridad fuera de las oficinas centrales de Twitter en San Francisco (California, EE.UU.), luego de ser notificado de su despido.
Cabe resaltar que Musk, horas antes, había asegurado que iba a comprar la red social y dijo que lo hacía «por el futuro de la civilización«, una decisión que tomó 24 horas antes que expirara el plazo que le había dado una jueza para abrir un proceso si no se formalizaba la compra.